Aplicar tecnología web en un negocio no deben ser entendido como un fin, sino como un medio para poder llegar a los objetivos de las empresas.
La tecnología bien aplicada ayuda a las empresas a ser más competitivas e incrementar su capacidad de producción, agilizar los procesos, la operación del negocio y mejorar la toma de decisiones, ya que brindan información relevante y en tiempo para las empresas.